En este blog encontrarás reseñas de danzas peruanas, monografías, fotografías y frases de danzas.
29.4.16
25.4.16
5.4.16
León Danza de Jivia
Ubicación Geográfica
El distrito de Jivia es uno
de los siete distritos y capital de la provincia de Lauricocha, del
departamento de Huánuco. Según información del INEI, recogida en el XI Censo
Nacional de Población 2007, cuenta con una población de 2,488 personas
distribuidas principalmente en el ámbito rural. Es en el centro poblado de
Jivia, ubicado a 3,388 m.s.n.m. y con una población de 405 habitantes, donde se
practica e interpreta anualmente la danza León Danza durante la fiesta en honor
al Patrón San Juan Bautista entre el 21 y el 26 de junio, siendo los días
centrales de la misma el 24 y el 25.
Mensaje de la danza
El León Danza es una
representación de carácter agrícola en la que un grupo de animales muestra su respeto
a figuras tutelares como el sol o Tayta Inti y el patrón San Juan Bautista. En
ella se escenifica el proceso de producción agrícola en honor a la madre tierra
o mama pacha, quien se manifiesta en el personaje de Mamá Rayhuana.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Personajes de la danza y vestimenta
Los personajes de la danza
son el león, el cóndor, la Mamá Rayhuana y el luychu o venado, interpretados
solamente por varones de la comunidad, quienes asumen también los roles de
segundo guiador o trasguiador, guiador mayor o principal guiador y mayor mayoraza,
dentro de la organización del grupo y la coreografía. Este último es un cargo
de prestigio asumido sólo por los mayores que ya han bailado y pasado por los
demás cargos. En vez de danzar, su función
es la de convocar a ensayos y supervisar la vestimenta y coreografía de los
danzantes durante la fiesta, así como aplicar multas o sanciones simbólicas –consistentes
en botellas de aguardiente o chicha, o también hojas de coca- si estos no
cumplen adecuadamente con los compromisos adquiridos.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
El león es el personaje principal dentro de León Danza, considerado como el rey de
los animales y símbolo de orden, seguridad y control en el desarrollo de la
labor agrícola. Es representado por un grupo de entre cinco y doce danzantes.
Son ellos quienes asumen los roles de guiador mayor y segundo guiador. Los
danzantes del León Danza en la cabeza visten un paño blanco sobre el cual se
coloca la cabeza disecada de un puma u otro felino, decorada con abundantes
perlas y espejos. De ésta, se desprende una cola larga hecha con cabello humano
adornada con cintas entrecruzadas, y
debajo de esta un mantón con imágenes de felinos. Llevan guantes y pañuelos
blancos en las manos, con las que sujetan patas disecadas de felino agitándolas
como dando zarpazos. Su traje se compone de una camisa blanca con mangas
largas, y fustanes de diferentes colores con blondas anchas que van encima de
los pantalones. La camisa y los fustanes van recubiertos por un chaleco y un
par de mantas respectivamente que combinan en colores, ornamentados con
pequeños espejos en forma de estrella y coloridos bordados con motivos florales
o con figuras alusivas a la costumbre de León Danza en Jivia. Encima de la
camisa y el chaleco se colocan estolas blancas alrededor del cuello y en los
brazos, sujetándolas a la altura de los codos con cintas de diferentes colores.
Llevan cascabeles en ambas piernas, de modo que su paso resuena constantemente
al hacer las mudanzas o desplazamientos de la danza.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
El cóndor es el segundo personaje en orden de jerarquía dentro de León Danza, aunque
sólo es representado por entre una y tres personas pues la mayoría busca
interpretar al león. El danzante que interpreta al cóndor no asume ningún rol
en particular dentro de la coreografía, salvo en ocasiones especiales donde
hace de trasguiador. En cada mano lleva un pañuelo blanco y grande, con los que
simula las alas y el vuelo del cóndor. Su vestimenta es muy similar a la de los
leones con la diferencia que en la cabeza llevan el cuerpo disecado de un
cóndor o una figura artesanal de cóndor hecha de madera o tela.
Es responsabilidad del león
que asume como guiador mayor el seleccionar a aquellas personas que interpretaran
al luychu y a la Mamá Rayhuana.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Dentro de la danza el lluichu (o también luychu) representa la figura de un
agricultor que abre surcos en la tierra, trabajando en conjunto con Mamá
Rayhuana y los demás animales para llevar a cabo la siembra y cosecha. La
indumentaria del luychu consiste en una cabeza de venado disecada y con
cuernos, cuya piel cubre toda la espalda del intérprete. En las piernas lleva
cascabeles y con los brazos carga una chakitaqlla, arado de pie andino de
origen prehispánico y aún en uso en gran parte de los Andes peruanos.
Con respecto al uso de
partes de animales, cabe resaltar que se ha constatado a través de diversas fuentes
que las pieles o partes disecadas de animales empleados en la representación de
León Danza no son de origen reciente, sino que se trata de objetos conservados
y heredados de una generación a otra. Del mismo modo, frente a la carencia y
deterioro de las pieles o partes disecadas, los danzantes han optado por el uso
de imitaciones o representaciones simbólicas como reemplazo de tales
implementos, antes que por la caza de animales para disecarlos; en consecuencia
se ha comprobado que León Danza no afecta o deteriora la integridad de especies
de fauna silvestre.
La Mamá Rayhuana es un personaje mítico que representa a la
madre tierra o mama pacha como la proveedora de los alimentos básicos; viste
con una blusa blanca o de colores y lleva puesto fustanes de bayeta que pueden
ser de color rojo, blanco, azul, verde, etc. Usa un sombrero adornado con
flores, y cubre su rostro con un velo. En la espalda lleva una lliclla o atado
donde carga diferentes productos agrícolas como papa, oca, mashwa y maíz; y en
sus brazos lleva envuelto en una manta o en pañuelos a un muñeco que simboliza
a su hijo.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Fotografía: Gregorio edber Bejarano Coz
De acuerdo a los
testimonios recopilados se advierte que durante la primera mitad del siglo XX,
o con anterioridad a esta época, también se habrían representado otros
personajes como el jirish o picaflor, y el tinya pishgo o pájaro tamborcillo, que
eventualmente fueron dejados de lado dentro de la danza. En base a estos mismos
testimonios también se supo que en algún punto se quiso introducir al cazador como
personaje, lo que terminó siendo rechazado por los danzantes de mayor edad que
consideraron dicho cambio como externo al desarrollo de la tradición y a la
costumbre de León Danza.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Por sus actuales personajes
y los que solían ser parte de la representación, así como el correlato de la
representación, León Danza constituye una de las diferentes variantes locales
de la danza Rayhuana o Mamá Rayhuana distinguiéndose por la preponderancia del
león como personaje principal. Así, lo anota el investigador huanuqueño Víctor
Domínguez Condezo, quien registra la presencia de la danza Mamá Rayhuana y sus
variantes en diferentes provincias de Huánuco, como el caso de la danza Atoq
Alcalde en el distrito de Llata, o la danza Cóndor danza en los distritos de
Chavinillo y Cauri, así como en algunas provincias y distritos del departamento
de Pasco; Que, de acuerdo a información y testimonios recogidos en el
expediente, la representación vigente de León Danza derivaría de la reducción
en el siglo XVI de pueblos originarios dentro del actual poblado de Jivia, lo
que provocó el encuentro de diferentes variantes de costumbres similares,
resultando en que el león se volviera el personaje principal. También se señala
que la representación de la danza en estas fechas respondería a una práctica
evangelizadora muy común en la época colonial, en la que se superpuso el culto
al patrón San Juan Bautista a las celebraciones locales del Inti Raymi, efectuadas
en el solsticio de invierno entre el 20 y 24 de junio.
Asimismo, para el
reconocido arqueólogo Augusto Cardich, existe un paralelo entre la extensión de
las danzas con la persistencia de relatos míticos sobre Mamá Rayhuana,
personaje presente en León Danza y que habría sido una divinidad de los pueblos
originarios de la región, simbolizando la fertilidad y el origen de los alimentos.
Estos aspectos dan
interesantes indicios acerca del importante y complejo trasfondo histórico que envuelve
a León Danza, en especial si se toma en cuenta que Lauricocha y provincias
aledañas pertenecieron al Corregimiento de Huamalíes, antiguo e importante
ámbito de administración colonial en donde se implementaron fuertes políticas
de reducciones y campañas de extirpación de idolatría.
Fechas en que se baila
La representación de León
Danza comienza en la madrugada del 24 de junio, día central de la fiesta a San Juan
Bautista, con la aparición de los danzantes realizando el yalinacuy. Se trata
de un acto propiciatorio que augura un año de abundancia, siempre que los
danzantes lleguen a la puerta de la Iglesia antes de que suene el repique de la
campana, cante el gallo, lleguen los pinkulleros y aúlle del zorro.
Seguidamente el mayor mayoraza pasa a supervisar la vestimenta de los
danzantes, imponiendo multas o "castigos" a los infractores.
Al amanecer se degustan
platos típicos y el león guiador mayor ofrece una tinaja de aguardiente y chicha
al Tayta Inti o sol, a quien se rinde homenaje con una carrera en la plaza en
la que participan danzantes y varayos o varayoqs, autoridades tradicionales
vinculadas a la producción agrícola. Luego de esto los danzantes visitan las
casas de diferentes personas en la comunidad, recibiendo ofrendas voluntarias.
Las madres llevan a sus hijos ante los leones y cóndores, quienes simulan comérselos
en un acto ritual denominado pishta, con el que se busca quitar el mal del
susto a los niños pues se cree que esto los protegerá y bendecirá. Luego de
esto se realiza una misa en honor al Patrón San Juan Bautista, seguida de una
procesión alrededor de la plaza donde los leones cargan la imagen del santo
patrón; Que, finalizada la procesión se guarda la imagen en la Iglesia y se
continúa la fiesta con la puchca o concurso de hilado, el rocro garay o
compartir colectivo de alimento y bebida, y el trucay o presentación del nuevo
mayordomo. Luego de estas actividades los personajes de León Danza repiten el
recorrido de la mañana visitando hogares, recibiendo ofrendas y escenificando
el pishta.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Coreografía
El desplazamiento de León
Danza se hace en dos filas, encabezadas por los leones que hacen de guiador
mayor y segundo guiador respectivamente, y el cóndor al frente encabezando la
comparsa. El luychu y Mamá Rayhuana se desplazan más libremente alrededor de
los demás personajes, aunque también se pueden integrar a las filas y a la
coreografía. Durante el segundo día central -25 de junio- estos dos personajes
toman protagonismo y escenifican el proceso de producción agrícola u oga muruy,
una siembra y cosecha ritual en que se bendicen semillas entregadas por los
comuneros a Mamá Rayhuana.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Esta escenificación consta
de diferentes partes: el luychu simula el rahuay o barbechado, proceso en el
que se abre y voltea la tierra. Luego los leones retiran piedras y preparan el
terreno. La Mamá Rayhuana procede a sembrar recibiendo la ayuda de los
animales. Seguidamente, el luychu se emociona porque corresponde realizar la
cosecha y empieza a abrir la tierra. La Mamá Rayhuana y los demás animales
recogen las semillas como producto de la cosecha, mientras que los leones vigilan
que nadie se las robe. Las semillas son llevadas al despacho del mayor mayoraza
para que las cuente y las devuelva a sus dueños, quienes luego las siembran en
sus campos.
Fotografía: Gregorio Edber Bejarano Coz
Musicalización
La música es un elemento de
especial importancia en esta representación ya que los cambios en el ritmo y la
melodía marcan cambios en los pasos de la danza. Se interpreta con la tinya,
tambor de madera y cuero, como instrumento rítmico y con el pinkullo, flauta de
caña o tubo de plástico, como instrumento melódico. Ambos son ejecutados por un
mismo músico a la vez, si bien puede haber hasta dos músicos para hacer
relevos.
La melodía de León Danza
consta de tres movimientos: la introducción o kriulá, como llamado a los
danzantes, la pasión y la alegría, cada uno con caracteres distintos y vinculados
a momentos específicos de la coreografía.
No hay compañías o
comparsas que cultiven esta danza como un espectáculo. Quienes participan en León
Danza se ofrecen como voluntarios o son elegidos a través del jaray-jaray,
ceremonia ritual que se realiza dos veces al año y que cuenta con la presencia
de comuneros voluntarios, los ancianos del pueblo y las autoridades comunales.
La primera se da entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre para elegir a las
nuevas autoridades comunales o varayos, y la segunda entre la noche del 30 de
abril y la madrugada del 1 de mayo para seleccionar a los danzantes. Asimismo,
la participación en León Danza se vuelve un prerrequisito para que una persona
pueda asumir cargos dentro de la estructura de autoridades comunales vigente en
Jivia. Este hecho, sumado a la utilización de un mismo mecanismo ceremonial
para la elección tanto de autoridades comunales como de danzantes, muestra la
importancia de León Danza tanto por su carácter artístico ceremonial como por
su función de otorgar legitimidad o credibilidad a un individuo dentro del
grupo.
En base a información
recogida directamente, se sabe que desde hace varios años León Danza viene
siendo representada en Lima a finales del mes de diciembre, como parte de las
actividades de cierre de año de un conjunto de asociaciones de residentes huanuqueños.
Con este motivo un grupo de jivianos invitan a danzantes del mismo Jivia para
que escenifiquen el León Danza aunque sólo por un día, coordinando con las autoridades
comunales para pedir voluntarios y corriendo con todos los gastos de traslado.
Los directivos de estas asociaciones indican que traen danzantes de Jivia
porque sus asociados ya son mayores de edad, y sus hijos no muestran mucho
interés en danzar. Pero también señalan que así se mantiene la originalidad de
la danza en sus personajes, su vestuario y su coreografía. Esto demuestra un interés por conservar la
legitimidad de la comunidad de portadores y a la danza como elementos de
diferenciación incluso afuera de la localidad, lo que contribuye a afianzar la
expresión y reforzar el esquema de relaciones al interior de la comunidad de
Jivia.
La representación anual de
León Danza aporta, por múltiples razones, de forma significativa a la construcción
de una identidad local en Jivia. En primer lugar, porque es a través de su
interpretación que una persona se integra en la estructura social de la
comunidad de Jivia, ganando legitimidad como comunero y acceso a cargos de
autoridad. En segundo lugar, porque los personajes y el correlato coreográfico
de la danza la vinculan a un corpus cultural mucho más amplio, constituyéndose
en una variante local de la extendida danza Mamá Rayhuana, cuya presencia ha
sido documentada en múltiples provincias y distritos de departamentos del
centro del Perú. Y en tercer lugar porque, a su vez, constituye un factor de diferenciación
para Jivia en relación a otros pueblos dada la preponderancia del león como
personaje principal, rasgo no observado en otros espacios.
Finalmente, la ocurrencia
relativamente reciente de cambios en los personajes, y su representación en
nuevos espacios como Lima, son señal de una tradición que se mantiene vigente y
que se encuentra en un proceso activo de cambios y transformaciones.
Esta danza ha sido
declarada Patrimonio Cultural de la Nación mediante Resolución Viceministerial
Nº 016-2015-VMPCIC-MC del 26 de febrero de 2015, gracias a la labor de
investigación del Prof. Edgar Rolando Santiago Bernardo.
* Reseña tomada del Diario Oficial El Peruano.
* Fotografías gracias a Gregorio Edber Bejarano Coz
* Fotografías gracias a Gregorio Edber Bejarano Coz
Etiquetas:
danzas de jivia huanuco,
edber bejarano,
gregorio edber bejarano coz,
jivia,
leon danza,
leon danza de jivia,
leon danza jivia
Suscribirse a:
Entradas (Atom)